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Mesa de comedor Tao. Paz y armonía en la mesa

Mesa de comedor Tao.
Tanto la vida familiar como la vida social gira en torno a la mesa. Una mesa de comedor es como el gran “mamá” que nos reúne y que marca los horarios para los encuentros. A veces siento que no somos nosotros los que la rodeamos, sino que es ella la que nos rodea a nosoros. Es el punto de encuentro familiar en el desayuno, la comida y la cena. Cuando vienen los amigos siempre acabamos sentados a la mesa. Ya sea con la excusa de tomar un café, un aperitivo,  o una buena cena.

Poner y quitar la mesa son los grandes rituales del día. A veces hay turnos para hacerlo, porque lleva su tiempo y cada casa tiene una organización propia. Mi momento favorito son los minutos antes de las comidas. Todos se ponen nerviosos. Como si se fuera a dar el pistoletazo de salida hacia una carrera de atletismo. Me divierte observar las caras de los niños mirando la comida caliente sobre la mesa, aspirar sus aromas y ver su enorme sonrisa cuando les encanta el menú. Con ellos el momento de la comida se pasa volando. Lo que ha llevado media mañana en cocinarse desaparece en unos 10 minutos, sobre todo si hay adolescentes.

Nuestros momentos en la mesa me encantan. Lo que más aprecio son las charlas después de las comidas y si son alrededor de una buena mesa de comedor mejor. A veces son los únicos momentos del día. Esos en los que tienes la oportunidad de intercambiar opiniones, bromas o ideas con tu pareja, familia o los amigos. Por eso tener espacio para una buena mesa de comedor es algo que cada día valoro más.

Hoy os quiero hablar de la mesa «Tao”.  Me cautivó desde el primer momento que la vi. No sé si es el nombre o el diseño pero es a mi me transmite una sensación “zen”. Es una mesa que transmite paz y proporciona armonía. Y como su propio nombre indica, tiene infinitas posibilidades. Gracias a su diseño sobrio, sencillo y moderno puede combinar en todo tipo de ambientes y con una gran variedad de muebles, tanto modernos como antiguos. Lo mismo podríamos utilizarla para decorar una terraza, como para integrarla en un conjunto de estilo Zen o colonial. Y aunque a mi me encanta como mesa de salón, lo cierto es que encajaría a la perfección como mesa de reuniones de un despacho de arquitectos.

Es imposible entrar en un salón y no fijarte en ella. La tapa es de cristal templado transparente y apoya sobre una estructura de metal en la que las patas se entrecruzan dibujando líneas conectadas que forman el símbolo del infinito. Parte de su originalidad está en su base de madera. No es un estilo nada común esa forma de apoyar sobre el suelo.

Por otra parte el cristal y el metal son dos materiales que además de conferirle ligereza al conjunto soportan temperaturas extremas como frío y calor sin alterarse y sin que sufran deterioro. También es una mesa que podría combinar a la perfección con una sillería antigua de madera dándole a la estancia un toque ecléctico y moderno muy interesante.

Como siempre en Muebles Toscana, existen gran variedad de acabados tanto para la tapa de cristal y la estructura de metal como para la base con el fin de conseguir una mesa completamente personalizada a tu gusto.

Asi que si estás pensando en comprarte una mesa de comedor no dejes de echar un vistazo a sus posibilidades y combinaciones. En Muebles Toscana siempre encontrarás la fórmula que más te gusta para tu familia y para tu casa.