Historia del sofá moderno
Un sofá para los dioses
La historia del sofá se remonta a la época de los egipcios. Por entonces sólo los reyes, que se creían descendientes de los dioses, tenían el privilegio de contar con un sofá, al que le otorgaron una función de superioridad, al elevar a los reyes de la tierra.
También los árabes otorgaron al sofá la función de trono que, cubierto por tejidos y cojines, se convirtió en un mueble algo más confortable que el de los egipcios.
Un sofá para unos pocos
Los romanos llegaron más lejos dando un nuevo uso al sofá que pasó a ser denominado triclinium y a situarse en el comedor, para uso exclusivo de los hombres que lo emplearían para comer. Seguro que a todos nos viene a la cabeza esa imagen del emperador romano comiendo uvas recostado cómodamente en su “sofá”.
Es en esta época cuando el uso del sofá se populariza entrando en muchos hogares. Sin embargo este precioso mueble seguía siendo un símbolo de distinción y riqueza que sólo las familias más adineradas podían permitirse.
A finales de 1700 – con la industrialización, el sofá deja de ser sólo un elemento elitista, reservado para la clase noble, y comienza a extenderse llegando al resto de la población. Es en este momento cuando el sofá se vuelve un mueble más práctico y menos glamuroso.
El movimiento industrial. Un sofá para todos
Es tal la popularización del sofá, que todas las familias, incluidas las de clase media o baja, disponen de un sofá en sus hogares. Surge de nuevo la necesidad de distinguirse. Y es que el afán de destacar y la exclusividad están en el ADN del ser humano. De ahí que, en la segunda mitad del SXX, los grandes diseñadores cogieran las riendas del movimiento industrial y comenzaran a crear preciosos diseños y tejidos que transformarían para siempre el mundo del sofá.
El sofá moderno
Los años 60 fueron un punto de inflexión que marcaría el nacimiento del mueble actual. El sofá moderno llegó de la mano de grandes diseñadores como Le Corbusier quien creó un nuevo concepto de hogar, basado en el minimalismo y la funcionalidad. Cualidades que sentarían las bases de un estilo de vida más práctico. Este pionero del movimiento moderno trasladó sus revolucionarias ideas a sus diseños, creando muebles extraordinarios que transformarían el mundo del diseño y el interiorismo, entre otros.
En el nuevo mundo del sofá moderno, la comodidad se convirtió en algo tan importante como la estética. Surgieron nuevos tejidos, materiales y colores. Incluso los cojines cambiaron su relleno y su tamaño para ofrecer un extra de comodidad. Y así es como millones de hogares adquirieron esta pieza que, hoy por hoy, es símbolo de modernidad y uno de los muebles imprescindibles en todos los hogares.
El sofá sigue siendo un elemento distintivo
Si bien hoy en día existen diferentes fabricantes de sofás, de mayor o menor calidad, a menudo el diseño y el tamaño juegan con las apariencias, como símbolos de exclusividad.
Los siguientes modelos de sofá, sacados del catálogo de Muebles Toscana, son un ejemplo de esta combinación de estilo y confort. Una demostración más de que no siempre la sencillez es tan sencilla como aparenta.
Nota informativa:
Para escribir este artículo recurrí a diferentes fuentes de información e inspiración, que cito a continuación para aquellos que tengan curiosidad en el tema.
Si quieres saber más sobre la historia del sofá
Al buscar información sobre el movimiento industrial, me topé con un interesante artículo que hacía mención a cinco mujeres que contribuyeron a revolucionar la arquitectura desde el interiorismo y la decoración. Aunque en este post he mencionado a Le Corbusier, por ser una de las figuras más destacadas del movimiento moderno, he pensado que tal vez os gustaría conocer algo más sobre estas grandes mujeres que en un mundo eminentemente masculino, se adelantaron a sus tiempos para diseñar nuestro mundo actual.
https://www.decotherapy.com/mujeres-interioristas-famosas-historia/
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